También conocida como golden milk en UK, consiste en añadir la saludable cúrcuma a leche de vaca o leche vegetal a elección. Es una bebida de origen asiático que está desde hace un tiempo de moda y la verdad es que no defrauda cuando se prueba, no sólo resulta atractiva por su color y su exotismo.
La cúrcuma es un antibacteriano natural, tiene poder antiinflamatorio y facilita la digestión. Así que, a no pensárselo mucho y a probar esta alternativa al café con leche de media tarde, por ejemplo.
Las medidas las podéis ajustar, yo pongo las mías y con cucharadita me refiero a cucharilla de desayuno, no a la moca.
Ingredientes:
- 1 taza de leche, vegetal (por ejemplo de almendras) o de vaca.
- 1 cucharadita rasa de cúrcuma
- 1 pizca de pimienta
- 1 cucharadita rasa de jengibre
- 1/2 cucharadita de canela
- opcional: unas gotas de extracto de vainilla o 1 pizca de cardamomo
- 2 cucharaditas de sirope de arce o miel
Preparación:
- Calentamos la leche, al fuego o microondas. Antes de que llegue a hervir, retiramos del fuego y añadimos las especias
- Si queremos espuma, batirla y luego espolvorear con un poco de canela y cúrcuma para decorar
- En verano, si le añadimos hielo obtendremos lo que en aquí en Londres llaman «iced turmeric latte» En español puede resultar menos glamouros: leche con cúrcuma y hielo